La ausencia de evacuaciones normales puede generar diferentes malestares a una persona; la acumulación de material de desecho dentro del cuerpo puede incluso causar una asepsia, por ello el estreñimiento no es algo que se deba tomar a la ligera y se deben accionar medidas para contrarrestarlo.
Una persona con estreñimiento puede llevar a cabo diferentes estrategias que le ayudaran a ir al baño con regularidad. Por ejemplo, incluir en su alimentación fibra y abundante líquido, así como el evitar carbohidratos si se está en presencia de una crisis de estreñimiento puede dar buenos resultados.

Pero fuera de la alimentación y el hacer ejercicio existen más alternativas para ayudar con el trabajo intestinal y evitar que se convierta en una situación de emergencia.
Tal es el caso del uso de supositorios para hacer popo. Los supositorios se pueden usar en cualquier edad y para los niños los hay especiales para tratar sus casos.
Supositorios de glicerina
Estos supositorios pueden ser usados en personas adultas o niños y su función es estimular e hidratar las heces para facilitar su salida. Tienen una composición química con efecto laxante que actúa en solo minutos y puede ser una muy buena alternativa en casos de bebes que debido a la inmadurez de sus intestinos padecen de estreñimiento o personas adultas que retienen los desechos cafetales por muchos días.
Cuando las heces no salen en su debido momento tienden a resecarse haciendo más difícil su salida, el supositorio las hidrata aumentando su tamaño y provocando su evacuación.
Los supositorios también se usan para vaciar el intestino cuando se requiere hacer una intervención quirúrgica que lo requiera o para hacer un estudio de colonoscopia. Su rápido efecto lo posiciona como una excelente ayuda cuando hay problemas para ir al baño y lo mejor es que no está contraindicado en casi ningún caso.